Aunque la localidad de Cirujales actualmente forma parte del municipio de Riello, en el período que nos afecta pertenecía a Vegarienza.

Genara Fernández García era maestra en la localidad de Cirujales. Había militado en Unión Republicana, partido en el que había desempeñado el cargo de tesorera. En las elecciones de febrero de 1936 ejerció el cargo de compromisaria.

Tras la sublevación militar, abandonó su localidad de residencia para buscar refugio en Asturias. Allí prestó sus servicios en la Sección Administrativa de Primera Enseñanza del Consejo Interprovincial de Asturias y León. 

Tras la caída del Frente Norte astur-leonés, intentó salir al exilio. Embarcó en una de las naves que salían del puerto de Gijón con destino a Francia. Sin embargo, su embarcación fue atrapada por el Almirante Cervera, siendo remolcado a Ferrol. Posteriormente fue trasladada a León, donde tenía que comparecer todos los lunes en la Delegación de Orden Público.

Como fue inhabilitada para ejercer como maestra, se vio obligada a prestar sus servicios como institutriz, llegado a encargarse de la educación de las hijas de Emilio Hurtado. Finalmente, terminó trabajando como taquillera de los cines Mary.

El día 17 de diciembre de 1939 fue detenida y el día 22 ingresó en la Prisión Provincial de León. Se la acusaba de haber lanzado una serie de pasquines subversivos en la plaza de San Marcelo. En principio, ella afirmó que había recibido unos paquetes en su puesto de trabajo y la orden de dejarlos en la plaza. Sin embargo, el hecho de que entre los paquines apareciera, supuestamente, un documento personal de Genera Fernández sirvió para que las autoridades la condenaran a muerte tras un juicio sumarísimo que tuvo lugar en 1940.

Hasta octubre de 1940 permaneció en la Prisión Provincial de León. Después fue trasladada a la Prisión Provincial de Santa Cruz de Tenerife y a la Prisión Provincial de Valladolid. Finalmente, fue trasladada de nuevo a la Prisión Provincial de León, donde estuvo hasta el 4 de abril de 1941, momento en el que fue fusilada en el Campo de tiro de Puente Castro. Sus compañeros de trabajo de los Cines Mary se encargaron de pagar el ataúd y la fosa en el Cementerio Civil de León.

En junio de 2019 la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica realizó una intervención que permitió recuperar sus restos. Actualmente, descansan en el cementerio de Cirujales.