Juan Álvarez Álvarez estaba afiliado al Partido Socialista y desempeñó el cargo de concejal del Ayuntamiento de La Robla en 1936. Cuando se produjo la sublevación militar, se desplazó a la retaguardia republicana el 1 de agosto de 1936. Allí desempeñó cargos en la Cooperativa local y desarrolló actividades en el Servicio de Comunicaciones del Consejo Interprovincial de Asturias y León. El 13 de septiembre de 1937 se entregó a las fuerzas sublevadas y fue sometido a un juicio sumarísimo en el que fue condenado a doce años y un día de prisión.

Posteriormente,  fue sometido a un expediente de responsabilidades civiles incoado  el 14 de octubre de 1938 por la Comisión Provincial de Incautación de Bienes de León. El expediente quedó inconcluso. En 1939 pasó a la jurisdicción de responsabilidades políticas tras la promulgación de la Ley de ese mismo año. Finalmente, el expediente quedó inconcluso por la entrada en vigor de la Reforma para la Ley de Responsabilidades Políticas de 1942.